La extremeña María Antonia Trujillo aplicará medidas para habitar los más de tres millones de viviendas vacías existentes en España, de las que 103.000 se encuentran en Extremadura. Este es uno de los ejes fundamentales en la política de la ministra de Vivienda, que fomentará el alquiler de viviendas y trasladará a España las políticas en materia de viviendas protegidas y suelo que se realizan en la región, ya que considera un "referente" para su nuevo cargo el trabajo realizado en Extremadura. El halago es mutuo, ya que el presidente extremeño le aconseja que "arriesgue" en sus políticas, porque "siempre nos quedará Extremadura", parafraseando una frase de la película Casablanca.

Trujillo reiteró ayer en Mérida que entre sus objetivos al frente de este departamento está el de intentar "cambiar la cultura de la propiedad por la cultura del alquiler", al considerar que ello significa "movilidad, desarrollo socioeconómico y modernidad", sobre todo al tratarse España de "uno de los países donde menos vivienda en alquiler existe".

En este sentido, en el apartado de alquiler, las líneas esbozadas por Trujillo para Extremadura buscan romper con la cultura de la compra, y favorecer el arriendo, sobre todo entre los jóvenes, con el fin de ampliar sus expectativas laborales, al eliminar una de las principales ataduras para la movilidad en el empleo, que es precisamente la tenencia de una casa en propiedad.

Para ello se incide tanto en la regulación de los precios mensuales, limitados a 350 euros y con posibilidad de una subvención de hasta cien euros, como en acabar con el temor de los propietarios a alquilar su vivienda por la posibilidad de que el inquilino no abone la mensualidad y/o cause destrozos en la casa. En este último caso, la Administración suscribiría un seguro que garantice al dueño de la vivienda tanto el cobro de las mensualidades como la reparación de los destrozos.

Esta política puede suponer un importante aporte de pisos para alquilar, dado que en España hay actualmente más de tres millones de casas vacías.

En cuanto a la vivienda protegida en propiedad, a los tipos ya recogidos en planes anteriores (régimen general, especial y autopromoción) se añaden las modalidades de construcción de casas para rentas medias a precio tasado. Así, hay un primer apartado con precio máximo de 60.000 euros para rentas inferiores a 3,5 veces el salario mínimo, y un segundo de viviendas de hasta 100.000 euros para las familias que ingresen menos de 6,5 veces el salario mínimo. En ambos casos, se pretende que la promoción corra a cargo de la iniciativa privada, a la que la Administración facilitaría el suelo ya urbanizado.

CONFERENCIA SECTORIAL Para informar de todos estos planes, Trujillo convocará "inmediatamente" una conferencia sectorial del área con las comunidades autónomas, así como un "foro de encuentro" con todos los agentes que intervienen en el proceso de construcción de viviendas. En este aspecto, destacó que los jóvenes serán "pieza clave" en las políticas de vivienda que lleve a cabo, a través del Consejo de la Juventud "que probablemente sea el foro adecuado para esas políticas".

Todos estos objetivos se desarrollarán bajo "la concertación, el diálogo y las modificaciones legislativas que influirán en la vivienda y el suelo".