La Asamblea tendría que elegir un nuevo presidente de la Junta" y "mi partido (el PSOE extremeño) tendría que elegir un nuevo candidato para las próximas elecciones". Son las dos consecuencias que el responsable del Gobierno regional, Guillermo Fernández Vara, anunció ayer que tendría la instalación en Extremadura del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos radiactivos, que Albalá opta a acoger. Así lo reconoció ayer después de que lo avanzara el expresidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra, con el que se había reunido previamente, si bien Vara destacó que es algo que ya sabe el Ejecutivo central "desde hace tiempo". Además, recalcó que no tiene "ninguna duda" de que el silo nuclear no se ubicará en Extremadura y criticó a quienes cuestionan su oposición a ese proyecto.

El presidente reaccionó así ante las declaraciones que ayer efectuó en EL PERIODICO el secretario general del PP de Extremadura, Fernando Manzano, que le criticó por "sacar pecho y decir que iba a ir personalmente a presentar las alegaciones al ministerio" y después no fue ni él ni ningún consejero, sino un director general. Vara recalcó que el presidente de los populares extremeños, José Antonio Monago, conocía su determinación de dimitir en el caso de que se decida colocar el ATC en Extremadura y lamentó que se esté intentando "desvirtuar la realidad".

A juicio del jefe del Ejecutivo autonómico, si fuera por los populares él estaría "como un zascandil de un lado a otro" en lugar de donde debe --"mi sitio no está en las manifestaciones, sino en la instituciones", fue una de sus afirmaciones-- . "El director general presenta las alegaciones en el registro, pero soy yo quien las firma", sentenció criticando los continuos ataques hacia su persona de los populares, que consideró una estrategia equivocada. "El problema del PP de Extremadura no soy yo, son ellos", apostilló antes de comentar que prefiere no pensar que podría ocurrir si ganaran las elecciones, "porque como hagan lo que dicen, al menos vamos a estar entretenidos", ironizó.

"HACE CASI DOS MESES" Además del líder de la oposición y al Gobierno central, Vara detalló que había comunicado la decisión a su partido "hace casi dos meses" y al presidente de Adenex, José María González, al que agradeció la confidencialidad. Según explicó, hasta ahora no le había parecido necesario ponerlo en evidencia, pero justificó hacerlo ahora --tras mantener con Ibarra una de las reuniones que, según dijo, celebran habitualmente-- por los intentos de desvirtuar la verdad que atribuyó al PP. "Si no fuera porque todos intentamos enseñar la cabeza, yo no lo hubiera dicho", afirmó.

En este sentido, aprovechó para pedir a la oposición responsabilidad en el momento actual cuando, destacó, "tienen una buena oportunidad para resolver un problema". De hecho, recordó que, a diferencia del PSOE, tienen concejales en Albalá y les agradeció que hayan puesto un recurso contra el pleno en el que se aprobó la candidatura, aunque entiende que el PP se equivoca con su continua persecución hacia él.

Sobre su postura, Vara explicó que "vivimos tiempos para la lealtad" y que él la tiene a Extremadura, al Gobierno y al PSOE, pero que ante un conflicto de lealtades, si entran en colisión o contradicción, prima la lealtad a Extremadura. Esta es la base sobre la que sustenta su hipotética decisión ante una hipotética ubicación del almacén nuclear en la región a la que le reserva la máxima lealtad y en la que, en todo caso, está "convencido" de que no se instalará.