El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se pronunció ayer sobre las posibles negociaciones entre las dos Cajas extremeñas con la asturiana Cajastur, según ha informado la radiotelevisión pública del principado. A su juicio, las Cajas extremeñas se encuentran en un proceso de "diálogo a varias bandas", porque la decisión que se tomó en los consejos de administración de Caja Badajoz y Caja Extremadura "es hablar con otras entidades financieras y no hay por qué sorprenderse", comentó preguntado por esta cuestión al término de la reunión del Consejo de Gobierno de la Junta.

En cualquier caso, reiteró que él siempre ha defendido que los procesos de integración de cajas "lo puedan ser" con entidades financieras de comunidades autónomas "parecidas" a Extremadura, "por tamaño, por periferia", y porque "sería una buena decisión", pero insistió en que "el criterio con mayúscula lo marcarán los consejos de administración de las cajas de ahorro".

Además, aseguró que "sin duda alguna saldrán más informaciones en próximas semanas o meses relativas a las conversaciones que no es que están queriendo tener sino que tienen la obligación de tenerlas", porque el Banco de España "está marcando un horizonte en el que quiere que a lo largo de este año, con independencia de cuál sea luego el plazo de ejecución de los acuerdos, estén planteados los acuerdos", declaró.

Sin embargo, el presidente de Caja Badajoz, Francisco García Peña, desmintió nada más difundirse la noticia que desde esta entidad se hubiese mantenido recientemente contacto con Cajastur. "Conmigo, desde luego, no han hablado", afirmó.

Por su parte, Víctor Bravo, presidente de Caja Extremadura, ha señalado no poder "confirmar nada" al respecto, aunque reconoció que se han entablado contactos "con grupos de cajas" con el fin de estudiar la posibilidad de integrarse con ellas en un Sistema Institucional de Protección (SIP), pero no quiso entrar en detalles. "Algunas cajas piden confidencialidad", argumentó.