El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, pidió ayer respeto para el alcalde de Trujillo, José Antonio Redondo, y consideró que la decisión de poner su cargo a disposición del PSOE es "una decisión personal que le engrandece como ser humano".

Fernández Vara consideró que "se ha dado un exceso de protagonismo por parte de los medios" a este caso, aunque matizó que los periodistas "cumplen un fin social que no soy quien para juzgar".

Asimismo, el presidente de la Junta de Extremadura solicitó que "no se le condene tres veces por lo que ha hecho" a la vez que añadió que el pueblo de Trujillo debería hacer un análisis y comparar cómo estaba antes de la llegada de José Antonio Redondo y cómo está ahora.

"Ha sido un magnífico alcalde, un magnífico gestor, y se ha convertido en un magnífico político; por un hecho personal en su vida, hoy toma una decisión que demuestra hasta qué punto le tiene cariño al pueblo de Trujillo, y yo ante eso lo único que puedo hacer es respetarlo y trasladarle todo mi cariño personal y decirle que va a contar conmigo, con su partido y sus amigos incondicionalmente".

Durante la inauguración de una planta solar fotovoltaica en la localidad cacereña de Abertura, Fernández Vara dio su apoyó a José Antonio Redondo al afirmar que con su dimisión "ha hecho lo adecuado" aunque matizó que "en políticas hay cosas que son muy difíciles de explicar".

El presidente de la Junta explicó que "fue una decisión que tomó a título personal y que puso en conocimiento de la Comisión Ejecutiva Regional"

Además, el presidente de la Junta de Extremadura afirmó públicamente su deseo que no sea "una retirada de la política porque ha acumulado una enorme experiencia humana como gestor".