Extremadura está dando ya los primeros pasos sólidos en su proceso de diversificación energética. La puesta en marcha de centrales de ciclo combinado (a base de gas), solares y el futuro aprovechamiento de la energía eólica pretenden ser una alternativa a las instalaciones de generación eléctrica actuales en Extremadura, que son fundamentalmente la Central Nuclear de Almaraz (CNA) y las plantas hidroeléctricas del río Tajo.

Ayer mismo la Agencia Extremeña de la Energía (Agenex) anunció la instalación de paneles para la generación de energía solar fotovoltaica en 22 municipios de la región. Esto permitirá a los ayuntamientos obtener unos ingresos al volcar esta energía a la red eléctrica y también reducir su factura energética. Este proyecto se encuadra en un programa denominado Enersur, que cuenta con financiación de la iniciativa europea Interreg III. Además, están implicadas las diputaciones provinciales y el Banco de Crédito Local, del grupo financiero BBVA.

Las instalaciones supondrán una inversión de 770.000 euros (unos 128 millones de pesetas), a razón de 35.000 euros por municipio. Los paneles se colocarán en terrenos de propiedad municipal, según explicó ayer el presidente de la Diputación de Cáceres, Juan Andrés Tovar.

RADIACION DE 5 KILOVATIOS Los terrenos deberán contar con una superficie aproximada de 50 metros cuadrados con radiación solar directa de cinco kilovatios, donde serán instalados 48 módulos de paneles que serán conectados a la red de suministro eléctrico municipal y, por tanto, la energía que produzcan podrá ser vendida por los ayuntamientos adheridos al plan.

De momento, son 22 los municipios acogidos a la primera fase del programa, pero queda abierta la posibilidad de ampliar el proyecto a otros ayuntamientos que así lo deseen, de acuerdo a los criterios de inclusión establecido por Agenex.

FINANCIACION EN 7 AÑOS Cada instalación tiene un coste total de 35.000 euros, de los que, señaló Tovar, Agenex financiará el 25% (7.543 euros), los ayuntamientos el 10% (3.017,2 euros) y el Banco de Crédito Local facilitará financiación mediante créditos con un interés mínimo a siete años por un importe de 19.611,8 euros.

Este esquema de financiación está calculado de forma que la totalidad de la amortización del crédito sea sufragado por los beneficios que produce la instalación solar.

Según el presidente de la Diputación de Cáceres, la vida media calculada de la instalación es de veinte años, por lo que, a partir de los siete primeros años en que se amortiza el crédito, los ayuntamientos podrán comenzar a obtener rendimientos económicos.

El beneficio que pude producir una instalación de estas características, que además evita una emisión de 2.392,7 kilogramos de anhídrido carbónico anuales a la atmósfera, asciende a 50.000 euros, según las estimaciones de Agenex.