¿Y todavía nos sorprende cuando nos hablan nuestros mayores del abuso de autoridad de la época de la dictadura?No hay que mirar muy lejos para ver que hoy en pleno siglo XXI sigue existiendo esta.Quizás también las circunstancias ayudan, pues el trabajo escasea hasta el punto de que cualquiera se cree con autoridad para someter a los aspirantes a un puesto de trabajo, a pruebas, que además de atentar contra la salud de éstos también atentan contra su dignidad por el trato vejatorio a que son sometidos.Me estoy refiriendo a los socorristas de las piscinas municipales de Cáceres.Dudo muy mucho que alguien del Ayuntamiento de Cáceres conozca las circunstancias en las que les fueron realizadas dichas pruebas. Las empresas contratadas y subcontratadas para la explotación de dichas instalaciones les hicieron pruebas de resistencia y aptitud el día 11 de junio a las 9:00 horas de la mañana. Ese día y a esa hora en Cáceres teníamos 9ºC. Las pruebas les fueron realizadas en piscina descubierta.Me consta que más de un aspirante solicitó hacerlas en cualquiera de las climatizadas que tenemos en nuestra ciudad, incluso pagando ellos la entrada.La personas que realizaron dichas pruebas iban bien tapaditos, con buena ropa de abrigo, también me consta que algunos aspirantes abandonaron las pruebas sin acabarlas porque el frío no les dejaba respirar y casi acaban en urgencias.¿Y todavía decimos que nuestros jóvenes no trabajan porque no quieren? ¿Hasta dónde tienen que llegar para conseguir un puesto de trabajo? Me gustaría saber si las personas que pidieron estas pruebas están cualificadas técnicamente para realizarlas.Siento decir que me avergüenzo de llamarme demócrata, de presumir de un gobierno socialista, de una junta regional socialista, un ayuntamiento socialista y tener que seguir viendo estas atrocidades.