El edificio que alberga la titulación de Ingeniería Técnica de Telecomunicaciones en Cáceres --Escuela Politécnica-- permanece cerrado desde el 30 de noviembre, fecha en la que se desprendió un falso techo en el despacho de un profesor. Este hecho ha sacado a la luz desperfectos de mayor gravedad en este inmueble que vienen avalados por un informe del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la Uex donde se recoge que "el centro de trabajo objeto de este informe no reúne los requisitos de condiciones de trabajo según el artículo 4 del Real Decreto de Lugares de Trabajo".
Este informe fue solicitado al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales hace casi un mes por un grupo de profesores de Telecomunicaciones que detectaron que, tras las fuertes lluvias de los meses de octubre y noviembre, el edificio presentaba "más problemas de los que históricamente tiene desde que se abrió". "Comenzaron a caerse más plaquetas de escayola y a aparecer más grietas de las habituales", señalaron un grupo de docentes afectados. De la petición de este informe se enviaron copias al director de la Politécnica, al Vicerrector de Planificación y Economía y al gerente de la Uex.
Y es que los problemas que afectan a esta construcción no son coyunturales ya que, según reconoció el Vicerrector de Planificación, Agustín García, las más de 200 personas que desarrollan su actividad en este lugar, entre profesores y alumnos, vienen padeciendo las graves deficiencias que presenta el edificio desde el año 1999, fecha en la que la constructora Dragados hizo entrega de la obra a la universidad.
García aseguró en declaraciones a este periódico que desde el primer año de funcionamiento del edificio se detectaron goteras y desprendimientos en la fachada "por lo que éramos conscientes del mal estado antes de que se produjera el desprendimiento del falso techo en el despacho". De hecho, también se han registrado estos desprendimientos en la primera planta, según indica.
Agustín García asegura que cuando en enero de 1994 accedió al cargo de vicerrector, las obras de mejora de este inmueble eran "prioritarias" pero que no se pudieron acometer "por las carencias en el presupuesto" de la Uex.
El curso pasado la universidad logró pactar la entrada de unos 22 millones de euros destinados a mejoras en sus infraestructuras a través de distintos convenios --el principal con la Junta, Caja Extremadura y Caja Badajoz-- por lo que una vez conseguidos los fondos se planteó arreglar la cubierta del edificio, obra que estaba prevista para este verano. No se llevó a cabo porque no se sabía con seguridad, según García, el alcance de los problemas que arrastra esta obra por lo que el arreglo de la cubierta "no garantizaba una solución".
"Hasta ahora no se ha hecho un estudio serio en este edificio", dice García, por lo que la Uex encargó a una empresa especializada en control de la calidad (S.G.S.) una valoración que se espera esté lista el próximo mes de enero.
No obstante, el vicerrector aseguró que independientemente de las conclusiones, las obras de la cubierta son necesarias por lo que saldrán a concurso.
