"Decidí estudiar mi último año de la licenciatura en la ciudad portuguesa de Coimbra, la que más tradición de Erasmus tiene. Es una experiencia única que me está permitiendo conocer a gente y valorar cosas que antes no valoraba, como tener cerca a la gente que quiero. Hay momentos duros, sobre todo al principio, porque estás en un lugar que no conoces y con un idioma que no dominas, lo que hace muy difícil lo más trivial.

Después todo cambia, ves las cosas de otra forma y ahora considero que que lo mejor de haber venido a Coimbra es, precisamente, estar aquí."