Bono, líder de U2, compareció la pasada semana ante representantes de la UE para pedir la condonación de la deuda de los países pobres y sacar los colores a la mayoría de gobiernos por haber incumplido su vieja promesa de destinar el 0,7% del PNB a las ayudas al desarrollo. Los interlocutores, sin embargo, siguen con tapones de cera.