Probablemente, prestar la voz a un pícaro mapache en el filme Vecinos invasores haya sido el trabajo al que más tiempo ha dedicado Bruce Willis: 18 meses. El actor se encuentra satisfecho de su primera participación en una película de animación. "Me sigue resultando interesante hacer reír a la gente. Es un reto ser gracioso y hacer que los niños y los adultos se rían", dijo en Madrid, a donde llegó procedente de Cannes la semana pasada para presentar esta película que se estrena el próximo 16 de junio.
En su amplia filmografía, que incluye películas de culto (Pulp fiction ), de suspense psicológico (El sexto sentido ) o de pura acción (La jungla de cristal ), faltaban los dibujos animados.
El fundador de la factoría DreamWorks (Shrek y Madagascar ), Jeffrey Katzenberg, eligió a Willis porque quería dar al mapache RJ ese punto de "estafador al que todo el mundo adora" que el actor supo mostrar en el personaje de la teleserie Luz de luna que le hizo famoso."Tengo tres hijos que no han podido ver muchas de mis películas y quería hacer una que pudieran ver", comentó junto a Katzenberg, que impidió cualquier pregunta que no se refiriera al filme, los directores Tim Johnson y Karey Kirkpatrick y el actor Luis Merlo, que participa en el doblaje al español junto a Eduard Soto El Neng , Isabel Ordaz, Pepón Nieto y el mexicano Michel Brown.
La historia de unos animalillos (tortuga, mofeta, ardilla, una familia de puercoespines y dos zarigüeyas) que tras el invierno descubren que un seto esconde una urbanización con humanos consumistas que llenan los cubos de sabrosa basura, sirve a los creadores del filme, incluido Willis, para "intentar reirnos del consumismo frenético en Estados Unidos". "Los humanos --comentó el actor-- nos olvidamos a veces de que somos animales".
La dificultad para Willis ha estado en trabajar sin otros actores que le dieran la réplica. "Nunca sabes si el trabajo es suficientemente gracioso --afirmó--, aunque los directores me dieron mucho margen para improvisar".
El protagonista de Doce monos asegura que elige los papeles por el director y los actores y que no le interesan especialmente las películas con mensaje. Por el contrario, le gusta que la gente se divierta cuando va al cine, y él contribuye a ello. "No estoy cansado de hacer de héroe, sigo disfrutando como actor e intento seguir siendo creativo", comentó tras mostrar su sonrisa característica el actor, "que ha salvado siete u ocho veces el mundo", dijo el productor.
