Un pabellón semitransparente del que emergen dos ala de cristal y acero y cuyo interior es comparable a una catedral será la contribución del arquitecto valenciano Santiago Calatrava a la ´zona cero´ de Manhattan. Calatrava fue designado el pasado verano autor de la terminal de transportes del World Trade Centre, un área en reconstrucción tras la catástrofe del 11-S, por la Autoridad Portuaria de Nueva York. La pasada semana presentó el proyecto, al que comparó como "el corazón de un cuerpo que impulsa a la gente dentro y fuera". La futura terminal, que según las previsiones comenzará a estar operativa en el 2006 aunque no se completará hasta el 2009, conectará 14 líneas de metro, los servicios de ferry del río Hudson y quizás un enlace con el aeropuerto Kennedy.