Científicos de varios países han descubierto un planeta similar a la Tierra a unos 20.000 millones de años luz. Se trata de un nuevo cuerpo rocoso, localizado cerca del centro de la Vía Láctea, con una atmósfera muy parecida a la de la Tierra, aunque es mucho más frío. El descubrimiento es el resultado de un proyecto internacional en el que han participado 73 científicos de doce países.

El profesor Keith Horne, de la Universidad de St. Andrews, que ha colaborado en estos estudios, ha asegurado que el próximo objetivo es encontrar más con el fin de establecer si abundan o no planetas habitables, similares a la Tierra. "Si abundan, el próximo paso será la búsqueda de vida en esos planetas", afirmó Horne.

El nuevo descubrimiento, que lleva el nombre de ´OGLE-2005-BLG-390Lb´, tiene una masa cinco veces mayor a la de la Tierra y orbita alrededor de una estrella que es cinco veces más pequeña que el Sol, de ahí el frío extremo en él. Su atmósfera es similar a nuestra y se cree que su superficie rocosa esté debajo de unos océanos congelados que cubren su superficie.