Al menos ocho cachorros de lince ibérico han nacido este año en libertad en el Parque Nacional de Doñana. Esta cifra frena la caída de la natalidad que sufría el felino, que en 2005 marcó su peor registro, con un único parto en este espacio protegido. Uno de estos cuatro partos dobles se ha producido en la Reserva Biológica de Doñana -el corazón del Parque- lo que permite que este felino, el más amenazado del planeta, vuelva a colonizar la mejor zona de este espacio protegido y la más alejada de las carreteras y de la presencia humana, sus principales amenazas.

Estos ocho nacimientos se han visto favorecidos por el programa Life de conservación del lince. De hecho, tres de los cuatro partos de este año se han producido en zonas donde se habían desarrollado acciones de apoyo al lince, como cercados de cría de conejos.