Maestros y profesores más y mejor preparados. Este es el objetivo de los últimos acuerdos aprobados el pasado viernes por el Consejo de Ministros que, por un lado, fijan en cuatro años los títulos de grado que deberán cursar los maestros de educación Infantil y Primaria. Y por otro, establece que los profesores de Educación Secundaria, Bachiller, Formación Profesional y Enseñanzas Artísticas, de Idiomas y Deportivas deberán ser graduados universitarios y cursar un máster, para el que, entre otros requisitos, deberán acreditar el dominio de al menos una lengua extranjera.

En la rueda de prensa la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, aseguraron que los acuerdos tomados por el Ejecutivo permitirán "ampliar y mejorar" la formación inicial de los docentes, aprovechando las posibilidades que ofrece la adaptación de la universidad española al EEES y la creación de los títulos de grado universitario y de máster oficial.

En todo caso, los actuales diplomados o estudiantes de magisterio y licenciados con el Certificado de Aptitud Pedagógica (CAP) no perderán "ninguno" de los derechos adquiridos con sus títulos, subrayó la ministra. Cabrera informó además que los cambios que se introducirán en la formación de los estudiantes de Magisterio repercutirá en que los futuros maestros de Educación Infantil y Primaria cursarán títulos de grado de cuatro años de duración (240 créditos).

En cuanto a los profesores de Educación Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanzas Artísticas, de Idiomas y Deportivas, el acuerdo adoptado establece que será necesario ser graduado universitario y cursar un master oficial específico de un año de duración (60 créditos europeos) con unos requisitos y objetivos establecidos por la Administración. Entre estos requisitos, que mejorarán "considerablemente" la formación de los futuros profesores, estarán acreditar el dominio de una lengua extranjera, que el 80% de la enseñanza sea presencial y que los alumnos cursen prácticas docentes.

Tras la adopción de estos acuerdos, el MEC publicará las órdenes por las que se fijan los contenidos mínimos y objetivos de estas enseñanzas, lo que permitirá a las universidades desarrollar sus planes de estudio a estas mejoras, que afectarán a los futuros graduados.