Hasta hace poco, hablar por internet era sinónimo de Skype , el popular programa gratuito que ya tiene casi 73 millones de usuarios, o de Netmeeting , aplicación incluida de serie en el sistema operativo Windows. Pero en los últimos meses el mercado ha crecido y acoge cada vez más ofertas de telefonía IP, más o menos serias, que permiten ahorrar en llamadas e, incluso, olvidar del todo la factura del teléfono.

Las opciones disponibles se dividen en tres grupos. En primer lugar, aquellas en las que el usuario depende del PC, se instala un programa y habla con un micrófono y unos auriculares. Dependiendo del caso, se puede hablar con cualquier número, sólo con otros usuarios del mismo operador o sólo recibir llamadas. Una segunda opción, independiente del PC, es conectar al router doméstico un adaptador y, a este último, enchufar el teléfono convencional. Por último, hay terminales IP que se conectan también al router .

Sea cual sea la opción elegida, los proveedores coinciden en que la telefonía IP ofrece algo más que el ahorro en llamadas. "El usuario busca una comunicación multimedios. Eso es lo que le hace feliz", explica Hugo Scagnetti de ExisTI.

La telefonía IP está más implantada en empresas, donde hace años que se usa y donde la oferta de terminales es amplia. Para el hogar, ante la falta de regulación, las ofertas son tímidas y dispares: son la avanzadilla de lo que está por llegar.