Si en sus inicios el objetivo de los escúteres era ofrecer un transporte individual y económico, actualmente existen una serie de modelos que ya intentan acercarse al dinamismo de las motos. Este es el caso del X-Max, la última creación de Yamaha. Se trata de un escúter de 250cc que sigue la filosofía del exitoso T-Max, aúna dinamismo deportivo con una notable suavidad de funcionamiento.