En el Reino Unido e Irlanda, los únicos países de la UE en los que la tasa máxima sigue en 0,4 miligramos de alcohol por litro de aire espirado --en España es 0,25--, ya se plantean reducirla. Como medida adicional, Inglaterra recomienda prohibir a los conductores noveles que puedan llevar pasajeros de madrugada. Luxemburgo ya bajó la tasa permitida a 0,25 en octubre pasado, mientras que Finlandia, con un límite máximo de 0,25 gramos, sopesa reducirla todavía más. En Italia, el repunte en la siniestralidad entre los más jóvenes ha hecho plantear la posibilidad de endurecer las sanciones para las alcoholemias. Entre 0,25 y 0,40 el castigo podría alcanzar los 2.000 euros, un mes de cárcel y la retirada del carnet hasta 6 meses.