El pabellón Multiusos de Cáceres acogió el 5 de abril una nueva edición de la Gimnastrada. Ya van nueve y el festival gimnástico sigue creciendo y este año se rozó la cifra de 8.000 asistentes. En ediciones anteriores se había estimado que pasaron por el pabellón unas 6.000 personas, pero no se había hecho un cómputo exhaustivo. Se cumplía así uno de los objetivos de la organización, que quería que las gradas tuvieran el calor del público a lo largo de una larga jornada que arrancaba a las 10 de la mañana y no terminó hasta las 21.30 horas.

Por lo que respecta al número de participantes, los 1.380 inscritos de este año mantuvieron el nivel de años anteriores. Muchos grupos extremeños, pero también de otros puntos de España --de Cataluña, Valencia, Toledo, Sevilla y Gran Canaria-- y de Portugal. Precisamente, el aumento de la participación portuguesa, con cuatro grupos, fue una de las notas destacadas de la jornada. En total, 78 montajes puestos en pie por una sesentena de grupos, ya que algunos repetían.

La Gimnastrada arrancó en 1996 con la I Gimnastrada Cacereña, que fue evolucionando hasta convertirse en la I Gimnastrada Internacional en el año 2000. Hoy está considerada el segundo mejor festival de gimnasia del país después del Blume, que se celebra en Gran Canaria y tiene ya 45 ediciones. Los objetivos de la Gimnastrada siguen siendo después de varios años los mismos que en su inicio: promover las actividades gimnásticas colectivas, facilitar el intercambio socio-cultural, fomentar el deporte y exhibir montajes de coreografía y música por el mero placer de mostrarlos, sin afán competitivo. Así lo recordó Kiko León, el responsable del comité organizador.