Grabar los partidos del Mundial tiene hoy varias alternativas. Los grabadores de DVD con disco duro son la opción más popular en un momento en el que conviven también los grabadores de disco óptico, los mediacenters, los combinados de vídeo y DVD, y los portátiles, y se prevé que a partir de septiembre aparezcan los primeros lectores de alta definición, con dos formatos rivales: HD DVD y Blu Ray, antesala de una generación de grabadores que llegarán en un par de años.

La batalla por el formato de la próxima generación no va a coger por sorpresa a los consumidores, que han sufrido ya las guerras del Beta, el VHS y el 2000, más la del DVD-R con el DVD+R y el DVD-RAM. Ahora la mayoría de grabadores DVD admiten todos los formatos digitales, más la capacidad de leer DiVX, el más habitual de los programas de intercambio de archivos en internet. La necesidad de la inclusión del DiVX en los aparatos es "un fenómeno claramente español, por encima de Italia y muy por encima de Alemania", explica Jordi Rincón, jefe de producto en Panasonic.

EXTRAER GRABACIONES

El grabador DVD ha sufrido algunas transformaciones desde que aparecieron los primeros modelos. Los que llevan disco duro más discos ópticos extraíbles han ganado la partida a los que sólo tenían DVD extraíbles, porque añade más funciones, no dependen de que se disponga de soportes libres en aquel momento y permiten extraer una grabación para guardarla, si al usuario le interesa. "Con capacidades de hasta 400 Gb de espacio es difícil que te quedes sin espacio", comenta Rincón. Lo que sí que no se puede hacer es volcar el contenido de una película en DVD al disco duro, debido a la protección que incorporan.

Como añadido, los grabadores DVD con disco duro aportan una edición más rápida para suprimir espacios en blanco o anuncios, e intercalar imágenes. Y la vuelta atrás sobre las imágenes que se están grabando. Además, "con sintonizador TDT, añaden la función de guía electrónica de programación que dan las televisiones, y que permite no tener que programar una grabación, lo que simplifica mucho la relación con el aparato", argumenta Pere Rosset, jefe de producto en Pioneer. Algunos, incluso, tienen lector de tarjetas de memoria.

TRAUMA POR EL VIDEO

En este sentido, algunos usuarios, cuando van a comprar el nuevo aparato, todavía recuerdan sus problemas para programar el vídeo analógico. Por eso, los fabricantes están apostando por la simplificación de los menús y funciones, porque saben que es un elemento clave a la hora de seducir al comprador. "Hemos puesto dos niveles de acceso a los menús, sobre todo de edición, para que las funciones más básicas puedan hacerse en un solo clic", señala Rosset.

Otras alternativas de grabación las proporcionan los grabadores digitales portátiles, como los de Archos, y los combinados de vídeo y DVD, un producto que, señalan en Philips, "todavía se siguen fabricando, aunque van bajando las ventas". Los combis, como se les llama, permiten pasar el contenido de las cintas a un disco óptico.