Pedro Almodóvar está en ese selecto club de directores españoles capaz de generar una expectación grandiosa ante el estreno de una película. Mucho más si la protagonista acaba de recibir un Oscar convirtiéndose en la primera intérprete española en conquistar ese logro. Así, no es de extrañar que esta semana Los abrazos rotos reine en la cartelera.

El tejido de personajes no defraudará a los seguidores del cineasta manchego. Después de sufrir un accidente en el que no sólo pierde la vista, sino también a Lena (Penélope Cruz), su mujer, el guionista Harry Caine (Lluis Homar) ha aprendido a vivir dejando atrás su pasado. Sin embargo, cuando Diego (Tamar Novas) tiene un accidente, le pide a Harry que le cuente cómo fue su vida antes de quedarse ciego. Este se remonta catorce años, cuando aún utilizaba su nombre de pila, Mateo Blanco, y los días transcurrían junto a Lena, Judit (Blanca Portillo) y Ernesto Martel (José Luis Gómez) en una espiral de amor loco, celos, traición y complejo de culpa.

En uno de los actos de presentación, Almodóvar aseguró que con esta película pretende rendir homenaje a su familia cinematográfica. El manchego asegura que la película mezcla drama, comedia y "algunos momentos de thriller ". "Se trata de una película básicamente emocional y romántica, donde hay varias historias de amor que se cruzan para hacer más desdichados a sus protagonistas".

El filme también supone un vistazo atrás a su carrera, con la participación de actrices que le acompañaron en varias ocasiones, como Rosy de Palma y Chus Lampreave, y referencias a Mujeres al borde de un ataque de nervios . "Me gustaría que no lo tomarais como un autohomenaje", advirtió el cineasta.

Por su parte, Penélope Cruz asegura que su personaje de Lena le había dado "muchas alegrías". "El trabajo con Pedro a mí me hace muy feliz", concluyó.

ESPECTACULAR PREESTRENO

Otra prueba más de las pasiones que desata este filme se vio la noche del preestreno, el 18 de marzo. Calzada de Calatrava, el pueblo natal de Almodóvar, abrazó con efusión y sin fisuras un pase de Los abrazos rotos al mismo tiempo que Madrid. en el mismo momento que en Madrid. Y no faltó alfombra roja. De hecho, por el photocall , preparado para la ocasión, pasaron numerosos calzadeños, amigos y familiares del director manchego que se fotografiaron ante la imagen del cartel promocional.

En esos momentos la calle Fuencarral de Madrid estaba colapsada. El preestreno congregó a centenares de personas frente al cine. Aproximadamente 1.800 personas estaban invitadas al preestreno, muchas de ellas personajes conocidos, lo que generó una expectación mayúscula que culminó con la llegada de los protagonistas.