La historia de Carmen Maura y Pedro Almodóvar es la crónica de una reconciliación anunciada. Después de 17 años de separación, el cineasta, tras varios intentos de acercamiento, ha propuesto a la musa de sus primeras películas que vuelva a trabajar a su lado. La actriz, que siempre ha reconocido que con el cineasta manchego ha vivido grandes baches y celebrados éxitos, será, junto a Penélope Cruz y Chus Lampreave, una de las protagonistas de su próximo proyecto. Volver , cuyo inicio de rodaje está previsto para este verano, relata en clave tragicómica la vida de tres generaciones de mujeres y el salto que significa para una familia emigrar del pueblo a la gran ciudad.

Mujeres al borde de un ataque de nervios fue la película que disparó la trayectoria internacional de ambos. Significó un antes y un después. Las discusiones, malentendidos, jugarretas, desaires, choques de egos, desencuentros y celos vividos en el rodaje fueron a más en plena promoción de esta comedia de culto, que en 1989 optó al Oscar a la mejor película de habla no inglesa. Esa noche de los Oscar estalló todo. En Los Angeles, Almodóvar desairó a la actriz hasta el punto de pretender que ella siguiera la gala desde el gallinero. Carmen Maura acabó en la platea, pero 10 filas detrás de Almodóvar. Esa ofensa determinó el divorcio más sonado del cine español.

Maura desveló entonces que la crisis surgió a raíz de un problema personal. "Es la primera vez que Almodóvar ha escrito un guión pensando en mí y eso no es bueno, por que entonces se obsesiona", declaró. Meses después, el realizador precisó en la revista norteamericana Vanity Fair que ella "confundió la pasión que sentía hacia mí como actriz con la pasión amorosa, y empezó a comportarse como una esposa".