Desde su aparición en el 2001, el Yamaha Tmax 500 se convirtió en la referencia en la combinación del confort y la protección de un escúter con las prestaciones dinámicas de una moto. La firma lo actualizó con la incorporación de un segundo freno de disco delantero y el motor a inyección. En la tercera generación, apuesta por cambios que afectan a la estética y al comportamiento dinámico.