El Ministerio de Sanidad y Consumo firma un acuerdo con los principales diseñadores y fabricantes de ropa españoles --El Corte Inglés, Zara (Inditex), Cortefiel y Mango, entre otros-- para unificar las tallas de las prendas de acuerdo con un canon de belleza saludable, alejado de la extrema delgadez y ajustado a la morfología real de las españolas. El Gobierno pretende poner fin a errores y problemas de compra entre los consumidores, mejorar la autoestima de las mujeres y luchar contra contra la anorexia y otros trastornos alimentarios.