La IV Jornadas Extremeñas de Carreteras, inauguradas el pasado miércoles en la Escuela Politécnica de la Universidad de Extremadura (Uex), analizaron la influencia de las carreteras en el desarrollo de los municipios y los territorios, según destacó el director del encuentro, José Antonio Torroja. El lema de las jornadas, Carretera, ciudad y cultura: de la plaza mayor a las rondas , indica el "cambio de dirección" de este seminario desde su celebración por primera vez en 1992, indicó Torroja.

Recordó que las primeras jornadas que se celebraron, auspiciadas por la Uex, tenían un marcado carácter meramente técnico, mientras que ahora cuentan con un carácter más social y cultural, de tal modo que "sin perder su carácter formativo, ofreciesen una visión del carácter social de la profesión de ingeniero".

Por eso las jornadas, que se organizan en memoria del ingeniero José Antonio Fernández Ordóñez, incidieron especialmente en cómo las carreteras y los caminos sirven para unir e integrar territorios.

También se estudió cómo hay poblaciones que cambian y evolucionan de manera distinta según la influencia de las carreteras, otras que se han creado y fundado porque había una carretera o un cruce y algunas que han ido perdiendo población o influencia por lo contrario.

Para el coordinador de las jornadas, José Ramón Navarro, la carretera es uno de los proyectos emblemáticos de la ingeniería civil.