Desde su aparición en escena, la Suzuki GSX-R 1000 se convirtió en la referencia de las motos deportivas de alta cilindrada. El rendimiento de su motor (163 CV) y su ciclística la han convertido en la reina de los circuitos, aunque tantas prestaciones se pueden volver en contra en carretera abierta si no se presta atención al puño del gas. La Suzuki GSX-R es radical como pocas.