Una tesis de Ana Lourdes Oropesa (Unidad de Toxicología del Departamento de Medicina y Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Uex) ha analizado los efectos tóxicos en las carpas de la simazina , un principio activo incluido en productos herbicidas utilizados en cultivos de regadío y secano.

La tesis, calificada con sobresaliente cum laude, concluye que la concentración de simazina detectada en aguas extremeñas no tiene ninguna repercusión tóxica inmediata o a medio plazo sobre los peces que habitaban los pantanos contaminados. El primer suceso de contaminación importante a escala nacional fue detectado a finales de 1997 en diversas poblaciones del sudeste de Extremadura, donde los análisis revelaron que este herbicida aparecía a unos niveles superiores a las concentraciones máximas establecidas por la legislación que regula el abastecimiento y control de las aguas destinadas a consumo público.