Científicos australianos y norteamericanos han logrado un avance pionero en el mundo al dar vida a un gen de un tigre de Tasmania, especie extinguida desde 1936. Los investigadores han aislado un gen de un espécimen conservado desde hace un siglo de este marsupial australiano, que se parece a un perro. Una vez aislado, los científicos han introducido el gen en el embrión de un ratón. "Es la primera vez que el ADN de une especie extinta es utilizada para provocar una reacción funcional en otro organismo vivo", dice el director del trabajo.