Spencer Tunick, el fotógrafo que retrató a unas 7.000 personas desnudas en Barcelona no hace muchos meses, vuelve a la carga, pero esta vez en Nueva York. El pasado 26 de octubre plantó su cámara en la famosa estación Grand Central de Nueva York. Unas 450 mujeres desnudas posaron para él tumbadas en el suelo y de pie en este emblemático lugar. La sucesión de cuerpos pasa a corvertirse en una especie de esculturas orgánicas, según entiende Tunick. El artista explicó que en en esta ocasión sólo citó a mujeres porque "en EE.UU. el desnudo femenino se digiere con mayor facilidad que el masculino".