Un innovador cultivo de células dendríticas (saneadoras del sistema inmunitario) con virus del sida inactivados ha dado lugar a la primera vacuna terapéutica antisida que consigue reducir a un tercio la cantidad de VIH presente en la sangre del infectado. El ensayo, diseñado y realizado por médicos e investigadores del Hospital catalán Clínic, es el que ha logrado mayor eficacia terapéutica y menos riesgos para el enfermo entre las decenas de prototipos que se desarrollan.