Más de 70 niños participaron ayer en el estreno de la iniciativa denominada camino escolar.

Se trata de un proyecto pionero encaminado a evitar atascos en la entrada de los colegios y favorecer la autonomía de los pequeños a la hora de ir al cole. Se lleva a cabo como experiencia piloto en el colegio Nuestra Señora del Pilar. En la actividad, monitores de la asociación Minerva ejercen el papel de padres recogiendo a los pequeños en diversas zonas próximas al centro escolar, a modo de paradas, y les acompañan luego andando al colegio.

Los pequeños van protegidos en un cordón de seguridad y provistos de chalecos reflectantes. El objetivo es incorporar al recorrido un autobús simulado. El primer punto de encuentro fue el cruce de la calle Guijo con la calle Caramanchos en dirección al colegio, pasando por las traseras del centro de Salud.