La alcaldesa de Valdehornillos, Mariángeles Gil, compareció públicamente para explicar por qué los trabajadores municipales no habían cobrado sus nóminas. Señaló que se habían dejado sin hacer porque la secretaria, a la que había tenido que readmitir en su puesto de trabajo después de que una sentencia judicial del Tribunal Contencioso Administrativo de Mérida la obligara a ello, se había dado de baja a los dos días de su incorporación, junto con la auxiliar administrativo, por lo que la nóminas no estaban hechas.

La edil aseguró que todo es un "complot político del PSOE porque perdieron las pasadas elecciones en Valdehornillo y quieren gobernar a toda costa". Acusó a la Junta de Extremadura de no ofrecerla asesoramiento para solucionar este problema y de recibir como respuesta que la plaza de secretaria no estaba creada ni clasificada, por lo que no podían nombrar sustituto. Según Gil han resuelto el problema gracias al asesoramiento del PP. Además, afirman que llevan dos años solicitando al Consejo Consultivo de la Junta un dictamen sobre el nombramiento de la secretaria. Lo consideran nulo por varios motivos, pero aún no lo han recibido.