La localidad de Santa Amalia fue ayer escenario de una movilización vecinal en protesta por el traslado de la fábrica de Iberitos a la vecina de Don Benito.

La manifestación estuvo comandada por la alcaldesa del municipio, María del Carmen Barroso, y secundada por medio centenar de amalienses. La movilización no tuvo el respaldo vecinal que se esperaba desde la organización, hecho que la regidora atribuyó «al miedo» de los trabajadores a poder perder su empleo, si acudían a la protesta.

La concentración se inició en la plaza de España, junto al ayuntamiento. Con posterioridad, alcaldesa y residentes recorrieron diversas calles hasta finalizar junto a la fábrica de Iberitos, que da trabajo a unas cien personas.

Barroso sostiene que a día de hoy Iberitos no ha comunicado al ayuntamiento su decisión de irse (se anunció en una rueda de prensa el mes pasado). La alcaldesa dice estar contrariada por dicha decisión, máxime teniendo en cuenta que se ha volcado en gestiones para posibilitar la ampliación de esta empresa.

Cabe destacar que Iberitos se traslada a Don Benito aduciendo que en Santa Amalia no disponen de terrenos calificados industrialmente aptos para crecer, cosa que sí tienen en el polígono industrial San Isidro de Don Benito. La alcaldesa, sin embargo, señala que había acuerdo con los propietarios aledaños a la nave de Iberitos para la ampliación, pero se queja de falta de colaboración por parte de la Junta, que es la Administración que tiene que dar el visto bueno a la recalificación urbanística.