La droga tuvo un tremendo impacto en la sociedad especialmente de la década de los 80, llegando a ser hasta objeto de culto, que posteriormente trajo sus consecuencias. Años en los que la falta de información y recursos obligaron a muchos familiares de afectados a tomar la iniciativa en la lucha contra las adicciones y constituir las primeras asociaciones. Uno de los ejemplos es la asociación Apoyat, que cumple ahora su treinta aniversario.

Con motivo de dicha efeméride, la directora general del Instituto de la Mujer de Extremadura, Elisa Barrientos, visitó ayer las instalaciones de este colectivo de Villanueva de la Serena

En su visita a la comunidad terapéutica de Apoyat, que atiende a mujeres con problemas de adicción, Elisa Barrientos ha destacado que esta asociación es todo un ejemplo de superación con 30 años de trayectoria.

En la actualidad, y además de la gestión de diversos recursos asistenciales como su comunidad terapéutica, Apoyat lleva a cabo campañas preventivas y es lugar de referencia para prácticas de estudiantes. Según Paqui Hidalgo, representante de Apoyat, durante el año 2016, las acciones de educación en la prevención impartidas por Apoyat han llegado a unos 800 alumnos.

Asimismo, la asociación acoge a estudiantes en prácticas de grados formativos relacionados con el trabajo y la educación social.

Elisa Barrientos ha expresado a los representantes de Apoyat su compromiso de seguir respaldando desde la Administración la labor que presta esta asociación de Villanueva.