El Ayuntamiento de Don Benito y la Asociación Pro Personas con Discapacidad Intelectual (Aprosuba-4) firmaron ayer un convenio de colaboración para la concesión de una subvención de 24.000 euros destinada a la mejora de las instalaciones de la asociación.
Ambas instituciones están interesadas en establecer un programa de cooperación para favorecer la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual de Don Benito y de las localidades cercanas.
El consistorio ofrece la posibilidad de que estas personas se integren, facilitando el uso de las instalaciones municipales.
Las actividades se desarrollarán en el Patronato Municipal de Deportes, en el Conservatorio Municipal de Música, en el Centro Educativo Municipal, en la Casa de la Juventud y en la Finca Municipal Doña Blanca.
Este apoyo, "extenso y generalizado", según los responsable del ayuntamiento dombenitense, mejorará el bienestar físico y emocional de las personas con alguna discapacidad.
"El desarrollo de actividades en entornos normalizados mejorará su calidad de vida, favorecerá la inclusión social y las relaciones interpersonales entre los propios discapacitados", indicó un miembro del ayuntamiento durante la firma del convenio, que añadió que "el uso de la piscina climatizada posibilitará un programa de hidroterapia".
El Conservatorio será sede de un programa de música adaptada a personas con discapacidad intelectual que supondrá la participación conjunta de profesionales de ambos centros.
Además, se favorecerá la participación de las personas con discapacidad en las actividades de ocio y tiempo libre organizadas por el ayuntamiento.
INCORPORACION LABORAL También se prevé su inclusión en las actividades organizadas por las diferentes concejalías y, gracias al convenio, se potenciará la incorporación laboral de estas personas a través de los programas o convenios de inserción laboral que el ayuntamiento desarrolle.
El colectivo de Aprosuba-4 nombrará a un responsable coordinador de cada actividad, cuya misión será determinar el apoyo necesario para las personas con discapacidad intelectual, formar a los monitores y evaluar los resultados del programa.
El convenio, que ayer mismo entró en vigor, tiene una vigencia de un año, aunque cabe la posibilidad de prorrogarlo cuando este plazo concluya.
