Ecologistas Extremadura ha denunciado ante la fiscalía de Medio Ambiente de Badajoz el hallazgo de un galgo ahorcado en el término municipal de Don Benito. El animal había sido torturado cruelmente con multitud de golpes por todo su cuerpo y con quemaduras en la parte exterior de las orejas. Fue ahorcado bajo el acueducto del canal secundario situado en el paraje conocido como Las Puercas, del citado término municipal de Don Benito.

Según dicha organización conservacionista, lo sucedido no es un hecho aislado. Unas semanas antes, el dueño de una parcela cercana encontró otro galgo ahorcado dentro de su propiedad. Esta asociación denuncia públicamente los continuos maltratos que siguen sufriendo los animales en la región. Se trata de un tema que las administraciones públicas siguen sin tomarse en serio, afirman.

En primer lugar, consideran que debe realizarse un censo fiable de perros de caza, con especial incidencia en los galgos. Este censo ha de acarrear un posterior control y seguimiento de la situación de los animales.

Ecologistas Extremadura exige que todos los perros de caza estén inscritos en el registro pertinente, según establece la ley, ya sea a nivel nacional, autonómico o local, en el que se detallen todos los datos del perro, entre otros el número de identificación de microchip que ya es obligatorio tenerlo en Extremadura. Además los cazadores, dueños de estos animales, tendrán la obligación de presentar la cartilla de vacunación y desparasitación ante el requerimiento de la autoridad competente. Los que no cumplan estas normas deben ser multados, señalan.