La Guardia Civil ha detenido a dos integrantes de una misma familia, vecinos de Campanario, por su presunta implicación en la elaboración, distribución y venta de droga. Estos arrestos son el fruto de la investigación iniciada a primeros de año de un entramado criminal asentado en la comarca de La Serena dedicado al tráfico de drogas, informó ayer la Guardia Civil, que añadió que ambos fueron interceptaron en los accesos a Mérida. Tras ser identificados, se registró su vehículo, donde se hallaron dos kilos de cocaína ocultos en el interior de sacos de pienso para animales.
A continuación, más de una treintena de Guardia Civiles y perros adiestrados en la búsqueda de drogas llevaron a cabo las entradas y registros en tres viviendas, dos naves y un almacén ubicados en Campanario. En estos registros se requisaron otros cuatro kilos y trescientos gramos de cocaína, y 26 kilos de sustancias para el corte de la droga. En uno de los inmuebles se desmanteló lo que se considera un laboratorio, donde se hallaron sustancias de adulteración y corte, utensilios tales como molinillo, prensa hidráulica, moldes para prensar y caracterizar la droga, basculas de precisión y bolsas dosificadoras para su distribución y venta.
También se intervinieron tres vehículos, teléfonos móviles utilizados por la organización y 34.788 euros presuntamente obtenidos del tráfico de la droga.
Con esta Operación, la Guardia Civil considera desmantelado uno de los más importantes laboratorios en Extremadura, punto de partida para la distribución y venta de cocaína en la región.
