El investigador villanovense Antonio Molina Cascos presentó, anoche en Villanueva de la Serena, el libro titulado La fábrica de jabones Gallardo . Se han editado 500 ejemplares por parte de la Diputación de Badajoz.

La obra es fruto de casi tres años de investigación y tiene como eje vertebrador el edificio de la Jabonera. Habla de la vivienda, la casa-habitación como se describe en el registro de la propiedad y en los legajos de la herencia, y la propia fábrica de jabón y sus impresionantes naves ya desaparecidas, naves que fueron un símbolo de la arquitectura industrial del siglo XIX, según explica el autor.

EVOLUCION Cascos señala que el edificio fue cambiando; no fue ajeno a la evolución de la sociedad en general y a lo que acontecía en Villanueva. En suma, no fue ajeno a lo que iba sucediendo en la historia de finales del XIX, todo el siglo XX y también en los primeros años del XXI hasta ser hoy lo que es tras su rehabilitación.

También ha podido confirmar que el proyecto de construcción de la casa es obra del reconocido arquitecto Aníbal González, que fue arquitecto-jefe de la Expo de 1929 de Sevilla y el arquitecto de la conocidísima plaza de España de la capital hispalense. Hay dos documentos que avalan su autoría. En pocos lugares fuera de Andalucía hay obras de este arquitecto, asegura.

"La Jabonera es un símbolo y es una suerte el poder conservar al menos la casa, no así las naves industriales", manifiesta. La casa se conserva al menos en su exterior, tal como la concibió. La parte interna, de estilo modernista, se ha perdido en gran parte. Todo, desde la estructura hasta un pasamanos, estaba diseñado por el arquitecto.

Investigar sobre la jabonera ha sido para Molina Cascos un reto personal. En principio estaba trabajando en otro proyecto y por casualidad cayó en sus manos la casa de la familia Gallardo. Le interesó la arquitectura y decidió profundizar también en la figura de José Gallardo, un hombre que pasó de ser un agricultor a crear esta importantísima empresa.