El Museo Etnográfico de Don Benito luce ya su claraboya restaurada, así como los vidrios en ventanas y puertas que lo decoran y dan acceso. Las obras de restauración y limpieza de este elemento del edificio finalizaron el 9 de agosto. Los trabajos han durado dos meses y han consistido en desmontar los vidrios emplomados, que han sido limpiados y restaurados. Aquellos que se habían perdido o deteriorado han sido sustituidos por otros de características idénticas a los originales.

La labor ha sido realizada por Maumejean de Vidrieras Artísticas, la misma empresa de maestros vidrieros que construyó las antiguas a principios del pasado siglo XX.

MUY DE MODA Con la restauración de la claraboya el museo etnográfico recupera una joya artística, ejemplo de lucernario de vidrios emplomados de estilo modernista, muy de moda desde finales del siglo XIX. Su función era la de cubrir los patios interiores de edificios oficiales y de viviendas de la alta burguesía --como es caso del edificio que alberga el museo-- dando luminosidad a las estancias interiores.

Rosa Cidoncha, directora del museo, indicó que está previsto organizar una exposición fotográfica en la que se muestre todo el proceso de restauración llevado a cabo en la claraboya. Se realizará en octubre y en ella se expondrán algunos dibujos, cartones y vidrieras cedidas por Maumejean, con los que el visitante podrá apreciar el proceso de creación de un vitral.

Para preservar esta obra de arte, la restauración ha incluido la reparación del lucernario superior que protege esta claraboya modernista. En concreto se han sustituido los cristales, se ha pintado y arreglado la estructura de hierro que la sostiene y se ha acondicionado el pavimento de la terraza donde se ubica.