El alcalde de Villanueva, Miguel Angel Gallardo, ha salido al paso de las críticas realizadas por los delegados sindicales de CCOO, Manuel Nuñez, y de CSI-CSIF, Carlos Colino, en las que arremetían contra la política de personal del gobierno y anunciaban la realización de una concentración de protesta para el próximo día 16 ante las puertas del consistorio. Gallardo advirtió que no va a aceptar "el chantaje y las amenazas", al tiempo que anunció la ruptura del diálogo con las dos centrales sindicales.

El alcalde no dudó en afirmar que las denuncias de CCOO y CSI-CSIF responden a "intereses particulares, partidistas y económicos", al tiempo que calificó las manifestaciones de los sindicalistas de "falsas y faltas de contenido", por lo que les pidió que "den nombres y apellidos de las personas que, como dicen, persigue el gobierno".

Sobre las demandas sindicales, Gallardo ha apuntado que toda la polémica viene originada por la apertura del registro municipal los sábados, que ahora obliga a cada uno de los auxiliares administrativos del ayuntamiento a trabajar cada 18 sábados. Una medida, que se ha tenido que adoptar "debido a las seis peticiones por escrito realizadas por el portavoz del PP, Víctor Fragoso, a pesar del pacto de caballeros que durante veinte años había entre todos los partidos políticos para que el registro sólo se abriera de lunes a viernes". No obstante, como indica el alcalde, se estaba negociando con los trabajadores varias alternativas para compensar la jornada de trabajo en sábado.

NEGOCIACION Sobre otras cuestiones, Gallardo apunta que se habían iniciado los primeros contactos en la negociación de la relación de puestos de trabajo, y retó a CCOO y CSI-CSIF a demostrar "a qué empleado se le ha cambiado a un puesto para el que no estuviera destinado".

Por último, advirtió que en su mandato "se acabaron las gratificaciones y las horas extra". "He llegado aquí para ser eficaz y no para ser simpático", dijo.