La romería de San Isidro de este año será difícil de olvidar en Hernán Cortés. Ayer se celebró algo más que el patrón, pues se festejó que un 1.462.400 de euros de la combinación ganadora de la Primitiva del jueves se van a repartir entre medio municipio y algunos vecinos de las localidades cercanas de Zurbarán, Santa Amalia, Valdehornillos, Medellín y Don Benito, lugares de residencia de parte de los 41 socios (sencillos trabajadores) de la Peña Los No que acertaron la combinación. El colectivo tiene su sede en el bar Va a ser que no, que regenta la mujer del promotor, Juan Diego Olivares, conserje del colegio. Tampoco olvidarán los números 9, 14, 23, 29, 40, 43,18 y 0, con los que cada uno se embolsará 36.000 euros.

Ayer, la romería se vivía de manera distinta, ya que amigos y familiares festejaban el premio que coincidía con el homenaje que el día anterior el colegio rindió a Feli Ceballos, una querida maestra tristemente fallecida en febrero. "El jueves vi en la casa de cultura a medio pueblo llorando por ella, y creo que desde el cielo nos ha echado una mano", señala Juan Diego Olivares, quien todos los jueves revisa el resultado, pero que esta vez no lo hizo; la jornada fue demasiado emotiva. Junto al director del centro José Luis Gutierro estuvo hasta la madrugada en el homejaje. Fue precisamente el maestro cuando, al escuchar ayer que el boleto ganador había sido validado en Santa Amalia, quien avisó a Juan Diego para que lo revisara. "Me dijo que me llamaría en cinco minutos si nos había tocado. Y el teléfono sonó; no podía articular palabra, solo gritaba y me puse a temblar", dijo Gutierro.

Olivares proseguía ayer su relato y dice que es difícil explicar cómo se siente y que todavía le parece que va a despertarse. Sobre todo porque lleva tres partes: jugaban él, su esposa, y tenía otra apuesta a nombre de sus tres hijas (dato este que su mujer, que está embarazada, reconoció que desconocía). "Yo tenía mucha fe y al final me he salido con la mía", recalcó.

Entre los agraciados lo que más se oía era que destinarán el dinero a "tapar agujeros", mientras que para explicar por qué se creó la peña, Olivares contó: "Se me metió en la cabeza lo de que la unión hace la fuerza, porque en este pueblo nunca ha tocada nada". Desde entonces han pasado tres años y desde entonces cada semana cada socio paga 10 euros, pero la crisis se ha hecho notar y han tenido bajas. Recuerda una con tristeza: "No estoy del todo contento, pues un compañero de los que más lo merece se ha borrado esta semana y la verdad me duele".

Ahora no sabe si seguir. "Trabajo mucho y tengo otras tareas; me quita tiempo, porque me encargo de todo. Me quiero quitar del medio. Estoy recompensado y feliz por haberlo compartido con mis amigos". La crisis se soportara mejor, pero el listón lo deja muy alto: 1,4 millones de altura.