Samira Azaiz, la mujer marroquí afincada en Villanueva de la Serena, que pidió ayuda públicamente a las autoridades competentes por el acoso que sufre por parte de su hijo, de 12 años, lleva su reclamación a las puertas de la residencia oficial del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en Mérida.

Según recoge la agencia Efe, ya protagonizó una protesta similar el día 4 de marzo, vuelve a quejarse con una pancarta La vida de esta mujer está en peligro; presidente, tú tienes la palabra. Samira cuenta con el apoyo del colectivo Compromiso con Villanueva, que remarca que la protesta durará toda la tarde.

Esta madre declara que desde que denunció su situación, hace poco más de un mes, el problema ha ido a peor y teme por su vida, la de su hija y la de su nieta, teniendo incluso cerrojos en las puertas de las habitaciones para evitar las agresiones de su propio hijo, que ante la imposibilidad de entrar en las mismas, deja grandes marcas de cuchillo en las puertas.

Azaiz es de nacionalidad marroquí y está afincada desde hace trece años en Villanueva de la Serena, y su hijo ha protagonizado ya varios episodios violentos hacia los miembros de la familia, lo que motivó en su día su internamiento en la Escuela Hogar San Vicente, de Cabeza del Buey.

No obstante, Samira Azaiz asegura que el menor no acude al centro, dando lugar "debido a su agresividad" a constantes discusiones en el seno familiar con temor para la integridad física de ella y de sus hijos restantes.

De estos hechos tienen conocimiento tanto el Ayuntamiento de Villanueva de la Serena, a través de la Concejalía de Servicios Sociales, como la Policía Nacional y el Juzgado, según asegura Samira Azaiz, que añade que nadie le ayuda.

La mujer tampoco pretende que se criminalice a su hijo, sino que "se le preste el asesoramiento psicológico adecuado para que restablezca una buena conducta y pueda reinsertarse con normalidad en la sociedad".