Unas 10.000 personas se dieron cita ayer en Navalvillar de Pela para disfrutar de la tradicional carrera de San Antón, más conocida como La Encamisá y que está declarada Fiesta de Interés Turístico Regional.

La nota negativa fueron los heridos, ya que al cierre de esta edición, Cruz Roja Don Benito ya había atendido a siete personas de diversa consideración. El más grave por un traumatismo craneoencefálico, por lo que tuvo ser trasladado al Hospital Don Benito-Villanueva. Hubo dos con traumatismo torácico, y el resto con politraumatismos leves.

Por lo demás, un vez más los peleños ejercieron de anfitriones acogiendo con gran hospitalidad a miles de visitantes, procedentes en su mayor parte de los municipios más próximos.

La tradicional carrera, que se desarrolló por un recorrido diseñado a lo largo de las calles de la localidad salpicadas de hogueras, duró casi tres horas, y en la misma participaron en torno al medio millar de jinetes, a lomos de todo tipo de monturas.

También hicieron el itinerario muchas personas a pie. Todos, perfectamente ataviados con el vestuario sanantonero , con gorro, camisa blanca y pañuelo rojo al cuello.

Entre el jolgorio y la algarabía que transmite esta fiesta popular, no dejaron de sonar los vítores y los vivas en honor a San Antón, San Antonino, San Fulgencio o El Chiquirrinino . Todo ello regado con vino de pitarra y biñuelos para todos.