La delegación que la Agencia Tributaria tienen en Don Benito podría dejar de prestar algunos de sus servicios (entre ellos los que oferta a las empresas) si se lleva a cabo la reforma aprobada ya por el Consejo de Ministros y publicada en el BOE del 3 de abril.

Así, este centro pasaría a tener una categoría segunda y sería una de las tres extremeñas afectadas (Trujillo, que pasará a nivel uno, es decir, sólo registrará documentos, y Navalmoral de la Mata, también a categoría dos). Esto obligaría a los ciudadanos a desplazarse hasta Badajoz, de la que pasaría a depender.

El PP presentó en la Asamblea de Extremadura una propuesta no de ley para mantener las atribuciones de las oficinas que fue apoyada por IU-Siex. Según señaló a EL PERIODICO EXTREMADURA el diputado popular Alberto Casero, uno de los impulsores de esta iniciativa, la reforma implicaría traslados para los trabajadores e incluso dejar de trabajar y una disminución del movimiento económico local generado por los vecinos de la comarca que llegan a hacer sus gestiones. "No se entiende esta restructuración cuando se van a abrir dos nuevas oficinas en Lleida", señaló.

Por su parte, el alcalde de Don Benito se mostró totalmente contrario porque "perjudicará gravemente al ciudadano".