La Asociación de Amigos de la Cultura Extremeña acertó de lleno con la organización de un nuevo debate sobre la unión Don Benito-Villanueva, un asunto que en las últimas semanas ha vuelto a saltar a la palestra informativa. El debate por tanto se trasladó a la calle, con la participación de representantes políticos, empresariales, educativos, sanitarios y de los medios de comunicación de ambas localidades, pudiéndose extraer del mismo conclusiones interesantes.

A la reunión no pudo asistir el alcalde de Villanueva, aunque sí estuvo el alcalde dombenitense Mariano Gallego, que aprovechó la ocasión para reiterar la petición de ayuda al presidente de la Junta de Extremadura, a la Diputación de Badajoz y a la Uex. Gallego dijo sentirse "incapaz para dar solución a esta cuestión", por lo que no dudó en afirmar: "Necesitamos la ayuda y asesoramiento de otras instituciones para resolver los problemas técnicos derivados de esta unión", tales como la unificación de servicios, de juzgados, etcétera.

FRACASO

Además, Gallego dijo que "sería un fracaso que tras la consulta popular sólo del 50 o el 60% de la ciudadanía apoyase la unión". Incluso dijo no importarle llevar al próximo pleno la unión, para que nadie dude de su apoyo.

Esta posición de prudencia fue entendida por el portavoz del PSOE de Don Benito, Julio Carmona, que suscribió el fracaso de un "sí" ajustado y que animó a trabajar por la unión "sin prisa pero sin pausa".

Por su parte, los presidentes de los empresarios de Don Benito y Villanueva, Daniel Nieto y Manuel Sánchez Ramos respectivamente, no vieron excesivos inconvenientes para hacer efectiva la unión a corto o medio plazo. Nieto dijo que desde la óptica empresarial sería importante sumar 50.000 habitantes, mientras que Sánchez Ramos levantó los aplausos de los asistentes al afirmar con rotundidad: "La unión es algo que la gente de fuera ve con claridad y nosotros que estamos dentro no la vemos".

Apoyó la teoría del empresariado el gerente del área de salud Don Benito-Villanueva, Arturo Sánchez Porro, que abogó por culminar la fusión "lo más rápido posible".

Por último, el empresario Pedro Dueñas apuntó cual puede ser una gran traba para esta fusión, que no es otra que "el perjuicio que haríamos a otras poblaciones de Extremadura, por eso tenemos que estar preparados para todas las zancadillas".