La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-UCE) de Extremadura ha mostrado su más "absoluto rechazo" a las tasas que deberán pagar los agricultores por el servicio de la guardería rural que se pondrá en marcha en Don Benito, y que fueron aprobadas en pleno con los votos a favor del gobierno del PP y en contra del PSOE.

En este caso, UPA-UCE aclara que "siempre ha apostado por el servicio de guardería rural, como lo hemos solicitado en reiteradas ocasiones a las administraciones públicas".

Sin embargo, la organización agraria estima que "el pago total de la tasa por parte de los agricultores y ganaderos es excesivo, puesto que ya están sujetos a otras cargas impositivas como propietarios de fincas rústicas".

UPA-UCE lamenta que este aspecto no haya podido ser corregido ni enmendado por el resto de organizaciones agrarias con representación en Extremadura, y en este sentido ha criticado al ayuntamiento por haber consensuado este servicio sólo con la Asociación Profesional de Agricultores y Ganaderos de Don Benito (Apag). "Denunciamos la actitud prepotente y caciquil del actual responsable del consistorio al impedir el diálogo y el consenso con el resto de organizaciones agrarias", apunta UPA.

Por su parte, el alcalde de Don Benito, Juan Bravo, ya ha anunciado que ha convocado a todas las organizaciones agrarias el próximo 4 de junio para tratar la forma de contratación de los cinco guardas rurales.