Para finales del año 2019, la nueva comisaría de la Policía Nacional en Almendralejo será una realidad. Una vez adjudicada la obra por parte de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior a la empresa sevillana Germán Gil Senda, la pasada semana comenzaron los primeros trabajos tras el vallado de la parcela sobre la que se levantará el edificio de dos plantas, planta baja y sótano. El espacio que ocupará es un terreno de 2.300 metros cuadrados en la calle Miguel de Unamuno, lindando con las calles Azorín y Benito Pérez Galdós, muy próximo al instituto Arroyo Harnina y a la zona de dúplex pintados de diversos colores, tal y como se le conoce a esta zona en Almendralejo.

Para empezar con esta obra, la empresa ha tenido que eliminar el mobiliario que había en una pequeña zona ajardinada donde se ubicaban farolas y bancos, justo en la parcela donde debe levantarse la comisaría. Desde el equipo de gobierno han informado que esa zona será cambiada por un pequeño parque que será ubicado justo en la parcela anexa, es decir, más próxima a la avenida Rafael Alberti. La idea es hacerla de manera similar, es decir, una zona de jardín, con iluminación y bancos, además de poder añadirle juegos infantiles.

El plazo de ejecución de las obras para hacer la comisaría es de un máximo de 16 meses, por lo que, salvo sorpresa, antes de 2020 el nuevo edificio estará en pie. Su construcción es una vieja reivindicación de la ciudadanía desde hace casi una década. Han sido muchos los directores generales de la Policía los que han constatado que es necesario dotar de nuevas instalaciones a este cuerpo de seguridad, pero no fue hasta la llegada del extremeño Germán López Iglesias al cargo en noviembre del 2016 cuando se le dio un impulso a esta actuación y que la misma apareciera consignada en los presupuestos generales del Estado.

La inversión prevista es de 1.277.000 euros, casi 700.000 euros menos de lo que estipulaba el precio base de licitación.

La construcción de la comisaría es muy necesaria porque las actuales dependencias, enfrente de la iglesia de la Purificación, se han quedado obsoletas. Además, carecen de accesibilidad para personas de movilidad reducida, pues el edificio no tiene ascensor. La plantilla la componen entre 55 y 60 agentes, de los que cerca del 90% se ocupan de tareas de vigilancia en la ciudad.

El nuevo edificio contará con oficinas administrativas y salas específicas para la renovación del DNI, servicio muy demandado en la ciudad. Además, habrá espacios importantes para labores de investigación científica.

Nuevo comisario/ De otro lado, la comisaría de policía nacional de Almendralejo ya tiene nuevo jefe tras la marcha del inspector Juan Antonio Gallardo. La persona que lo sustituye es Jesús Corrales Dios, un funcionario con amplia trayectoria en el cuerpo de policía nacional que, hasta la fecha, ejercía como segundo jefe del cuerpo de policía nacional de Mérida.

Jesús Corrales ya se ha incorporado a la oficina de comisaría nacional en Almendralejo. El alcalde, José García Lobato, y Luis Alfonso Merino, concejal de seguridad, ya han mantenido una primer reunión con él para ofrecerle una realidad más palpable de Almendralejo. La seguridad, especialmente en esta etapa de vendimia con alta presencia de temporeros, es una de las principales prioridades. El próximo jueves habrá una junta extraordinaria de seguridad por la campaña agrícola.