La décimo octava edición del Salón del Vino y la Aceituna de Almendralejo (Iberovinac) puso ayer el punto y final con una clausura oficial en la que sus fechas, el regadío y las ayudas a los agricultores fueron los temas que más destacaron en los discursos de las autoridades. Considerada como una feria estrictamente profesional, ha contado con medio centenar de expositores de los distintos sectores.

El alcalde de Almendralejo, José García Lobato, agradeció durante su intervención a las empresas participantes la confianza depositada en esta feria y expresó su deseo de que la próxima edición, la del 2020, pueda hacerse en mayo. De hecho, explicó que tras múltiples reuniones con las partes interesadas se había programado esta Iberovinac 2018 para mayo, aunque hubo que aplazarla a noviembre porque «el hombre propone y la Administración dispone».

En este sentido, precisó que a Avante le había sido imposible organizar los encuentros de los importadores internacionales para mayo, entre otros argumentos porque la entrada de la nueva ley de las contrataciones públicas dilató los plazos y era imposible hacer la feria en mayo o junio, por lo que ha tenido que ser de nuevo este mes.

Con respecto al proyecto de regadío en Tierra de Barros, «no me queda otra opción que la de reclamar y ser reivindicativo», indicó Lobato. El alcalde considera que un proyecto al que se han sumado más de 1.500 agricultores merece atención y espera que se den los pasos para ello.

En este sentido, Manuel Mejías, director general de Desarrollo Rural de la Junta, presente en la clausura de Iberovinac, alabó el gran trabajo desarrollado por la Comunidad de Regantes estos años y dijo que se trata de un proyecto «enfilado». También recordó que la intención de la Junta es que la redacción del proyecto de obras se adjudique antes de finales del presente año para poder comenzar con los trabajos sobre el terreno en el 2019.

Además insistió en que la Junta está reclamándole al Ministerio de Agricultura que declare el proyecto de interés general para la nación con el objetivo de que entre de lleno en la financiación a tres partes junto a agricultores y Gobierno regional.

Ayudas/ En su intervención, Manuel Mejías abogó por apostar por la calidad de los vinos para llegar al éxito. Señaló asimismo que para lograrlo son fundamentales los programas de reestructuración y reconversión de viñedos. Y dio un dato, 2018 es el año en el que la Junta de Extremadura más ayudas ha proporcionado en este apartado, ya que se ha pasado de los ocho millones a los 16, de los que se han beneficiado 960 agricultores.

En alusión al cava y a la estrategia que mantendrá la Junta para oponerse a las restricciones planteadas por el Ministerio de Agricultura, el director general recordó que «hay un recurso presentado y seguimos a la espera de tener una respuesta».

El presidente de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, Nicasio Muñoz, también defendió, por su parte, la necesidad de que esta feria continúe por el bien de los agricultores.