La biblioteca municipal Marcos Suárez sigue cerrada al público después de que el ayuntamiento tomara esta decisión tras comprobar al grave deterioro de una de las zonas de la cubierta del centro cultural San Antonio, concretamente la que se encuentra en la sala de estudio y que ha provocado la aparición de varias fisuras en la cornisa. La sala de estudio, por tanto, sigue cerrada, pero no así el préstamo y devolución de libros para los usuarios que sigue vigente en las dependencias del archivo municipal, situado en la avenida de San Antonio.

Desde el equipo de gobierno todavía no han adoptado una decisión sobre dónde trasladar la sala de estudio de la biblioteca, ya que aún no tienen los resultados del informe técnico que han solicitado a la Junta de Extremadura sobre una evaluación concreta de los daños de la cubierta. No quieren precipitarse en tomar una decisión, ya que la misma será distinta si el deterioro de la cubierta puede arreglarse en cuestión de semanas o, si por el contrario, se precisa de una obra más larga.

En las últimas ocasiones que se produjo el cierre de la biblioteca por circunstancias similares, la sala de estudio se habilitó en el centro cívico. Todavía no hay sede futura para trasladar la biblioteca.