En noviembre de 1981 ser ama de casa en España dibujaba un concepto que hoy día no encajaría en la actual sociedad. La vida ha evolucionado. Muchísimo. Y las personas. Que se lo digan a la asociación Amas de Casa ‘Nuestra Señora de la Piedad’, que acaba de cumplir 40 años y ha estado presente en todos los episodios de la vida social democrática de Almendralejo.

Su germen nació en aquellas quedadas cada 8 de marzo antes de los 80 para después afianzarse como asociación. Lola Guerrero fue la primera presidenta, pero apenas un año después llegaría Toni Calvo, que se mantiene a la cabeza de un grupo de mujeres aún activo y que acaban de completar el Camino de Santiago, «que ha sido como recorrer nuestros 40 años de historia».

Recientemente, la asociación ha celebrado un desayuno con ex alcaldes de la etapa democrática y con el actual alcalde Ramírez, que les anunció que han sido propuestas para recibir la Medalla de Almendralejo por su contribución a la ciudad.

Las Amas de Casa se siguen reuniendo en su sede de la plaza de la Iglesia y ahora tratan de hacer actividades más adaptadas a los tiempos actuales «con la idea de que podamos compartirla con nuestras hijas, sobrinas o gente más joven para asegurarnos ese relevo generacional».

Sabe Toni Calvo que las amas de casa ya dejaron de serlo tal y como la conocieron en los 80. «El cambio ha sido un proceso largo. Nosotros hemos sabido lo que no queríamos para nuestros hijos. Pero la ama de casa tiene una importancia capital. Es una figura, a veces degradada, pero un pilar que sostiene una familia. Sin tener títulos, muchas de ellas son economistas, profesoras o sanitarias dentro de un hogar. Tienen un valor incalculable que, en ocasiones, se nos olvida».

Han estado siempre reivindicando mejoras para la ciudad y fueron importantes en las protestas para que se construyera el hospital Tierra de Barros. Se han adaptado siempre a los tiempos y a las modas, como cuando crearon su propia peña del CF Extremadura a inicios de los 90, llegando incluso a ser pequeñas accionistas del club, viajando a muchas ciudades de España. 

«Nosotros, posiblemente, hemos sido la generación que más ha currado y trabajado para que ahora los jóvenes tengan otras oportunidades». Pueden sentirse orgullosa. 40 años de vida en Almendralejo. Enhorabuena.