17 empresas participaron este lunes del Salón del Vino y la Aceituna de Almendralejo en su vertiente profesional que se ha desarrollado en uno de los salones del Obrero Extremeño y en el que han estado representantes de empresas de vinos, cavas, aceitunas, aceites, sumilleres, escuelas de hostelería, distribuidores del canal Horeca y varios profesionales del sector de la agroalimentación. Para muchos de ellos, volver a participar de Iberovinac es volver a estar en las ferias que tienen un punto muy importante para la comercialización. Así lo piensa Paco Nieto, de Bodegas Romale, quien asegura que «echábamos de menos estar presentes en una feria así y aunque sea un formato reducido, sirve para ponerte en contacto con gente del sector y distribuidores que están pendientes del producto».

Saúl del Amo, concejal de Infetiba, ha realizado un balance «positivo» del formato de Iberovinac de este 2021, que ha combinado una parte lúdica para el público general concentrada en talleres, degustaciones y expositores en el parque de Espronceda con una jornada puramente profesional celebrada este lunes. «La única complicación durante el fin de semana ha sido el frio, que no lo esperábamos tanto. Los talleres de cata en el salón de los espejos del teatro han estado completos en sus aforos y han estado muy bien», según han podido transmitirme. También reconoce que los representantes de las empresas expositoras han quedado contentos con la experiencia.

Recuerda Saúl del Amo que esta versión de Iberovinac debe servir «de escaparate y herramienta para comercializar los productos», pero sobre todo para mirar más allá, concretamente a 2022, donde se pretende organizar un Salón del Vino y la Aceituna mucho más potente y con más actividades. Señala que le gustaría mucho conservar la parte lúdica y trabajarán para que Iberovinac también tenga ese apartado para el público general que se identifica así con esta feria singular en Almendralejo. 

Con respecto al momento para el sector, Saúl del Amo dice que las empresas están muy volcadas en la campaña de Navidad. Paco Nieto, de Bodegas Romale, asegura que la campaña había comenzado muy bien, «aunque estamos algo asustados con las nuevas restricciones de Europa» que puede frenar las exportaciones. Lo que sí subraya es la enorme «aceptación» que está teniendo el Cava de Almendralejo en el exterior. «Estamos llegando a mercados que antes no imaginábamos», asegura, al mismo tiempo que señala las bondades de la cosecha de este año que «va a producir unos cavas excelentes el próximo año».